Siguiendo la tradición familiar de Ruavieja, este pacharán se caracteriza por su elaboración artesanal y por la calidad de la materia prima escogida. El proceso comienza con la selección de  las mejores endrinas de cada temporada. El segundo ingrediente fundamental es el tiempo, dejando reposar el macerado a la temperatura adecuada durante meses, sin prisas.

Una vez que el ingrediente principal del pacharán está listo, para complementar su  receta, se le añade un toque de flor de Badiana, más conocido como el aromático anís estrellado, dando como resultado un Pacharán  natural, fresco  y de calidad inconfundible como el legado de la casa Ruavieja.

El resultado, un Pacharán natural y afrutado, con el sello de Ruavieja. Es aconsejable tomarlo en copa o vaso de cristal y fresco, entre 6 y 8 °C. Se puede enfriar la botella en el frigorífico o refrescar la bebida con hielo, ya que da frescura en la boca, aunque no demasiado para que no pierda sabor.

El origen de Ruavieja se remonta a 1978 cuando la familia Rodríguez Ovalle creó una receta única que se mantiene intacta desde entonces. De su receta original de Aguardiente de Orujo surgieron una serie de licores, todos con un punto de común: la calidad y tradición como requisitos fundamentales.

Ruavieja representa la mejor tradición aguardenteira gallega.